Estimados comunitarios, llegó el domingo día 27 de agosto de 2017 y, como es tradición en la Comunidad, nos acercamos 14 comunitarios a realizar la marcha benéfica IV Marcha BTT Los Simao contra las enfermedades raras, en Cehegín (Murcia, España). Nos acompañaban nuestros comunitarios jinetes, nuestros amigos de Los Mataos MTB, nuestros queridos comunitarios del Club Ciclista Fortuna Team y otros muchos amigos, con la idea de aportar nuestro pequeño grano de arena a esta causa.

Madrugamos en domingo con ilusión, sobre las 06:02 suena el despertador, salto, desayuno, cargar las bicis, viaje de una hora hacia Cehegín, saludos a todos nuestros queridos amigos y comunitarios, recogida de dorsales, preparación de las bicicletas y a la línea de salida.

Arrancamos la marcha BTT a eso de las 09:33, una marcha NO cronometrada, como me gusta y como debieran ser todas las no competitivas. Al no haber cronómetro salimos sin prisas y rodamos tranquilamente durante toda la marcha. No hay malos adelantamientos, e incluso se ven menos envoltorios tirados al suelo.

Ya lo he comentado en alguna ocasión y lo repito, si queremos que sigan existiendo las marchas por montaña hemos de ser muy cuidadosos con el medio ambiente, con las plantas y los animales, no ensuciar el monte, no salirnos de las sendas y tratar de hacer el menor ruido posible. Por parte de las autoridades medioambientales deberían restringir más el número de participantes máximo, siempre buscando el no «hacer polvo» el monte. Y, por supuesto, prohibir el cronometraje, esto hace que algunos «flipados» o flipro, crean ser profesionales y crean que la marcha es competitiva, tirando envoltorios al suelo, al monte, y haciendo adelantamientos peligrosos.

Volviendo a la marcha, no competitiva y no cronometrada, rodamos por caminos y alguna senda al principio, casi siempre con una leve inclinación de subida. Pronto entramos en sendas muy bonitas, muy juguetonas, con sus sube y baja, con sus eses entre árboles, muy divertidas.

Seguíamos subiendo, de cuando en cuando alguna rampa dura pero corta, un poco de pista forestal y a otra senda. Los comunitarios hicimos varios grupos, en función de nuestro estado físico y anímico, unos por delante, otros por el medio y otros por detrás.

Hasta el kilómetro 22 de la marcha fuimos subiendo principalmente, con descansos y algún descenso, pero la tónica general era ascenso. En el grupo de comunitarios donde me encontraba, con Antonio Asís, Pedro, Alfonso, Chules, Patricia Carmona, Kirill, Alonso, Gonzalo, Juan Caride y otros cuantos amigos comunitarios del C.C. Fortuna Team, rodábamos a buen ritmo y solo paramos un poco en el primer avituallamiento y otro poco en el segundo.

El año anterior, en la marcha, nos quedamos los últimos y llegamos bastante tarde, tras unos cuantos pinchazos, como cuento en la crónica. Este año no necesitábamos llegar los primeros, y no nos importaba llegar los últimos, pero sin que tuvieran que esperarnos demasiado para dar por finalizada la marcha. Y contábamos con que habría algún pinchazo o alguna cruda realidad. Por todo ello no nos despistamos mucho y rodábamos con un pedaleo alegre.

Subimos por un camino con pendientes duras, continuaba a la derecha, pero con cierta sorpresa vimos que los participantes tomaban una senda estrecha y más inclinada que el camino a la izquierda. Nos lo pensamos un poco para adentrarnos en ella, pero en la Comunidad nos caracterizamos por no atascarnos ante estas situaciones:

«Antes de atascar, volcar»

Es uno de nuestros lemas. Tomamos la senda, un poco técnica por la pendiente y por tener tierra movida y alguna piedra. Pude hacerla completa sin poner pie al suelo, salvo en su parte final, donde era más «sencilla», pero el de delante no me escuchó y no se apartó, así que me tocó hacer lo que menos me gusta: poner el pie.

La senda continuó unos kilómetros en llano y en bajada. Muy bonita la zona, muy estrecho el sendero, entre árboles, con muchas curvas, con subidas y bajadas cortas, muy divertida. Esta senda era nueva en el recorrido, el año pasado no estaba y la verdad es que mereció la pena recorrerla. Apenas era técnica, salvo algunos cortos tramos, de unos pocos metros, en general de dificultad media. Esto nos permitió disfrutarla aún más, incluso mirar un poco el paisaje de alrededor.

Afrontamos un descenso por pista forestal, una curva y el primer avituallamiento. Para cuando llegamos nosotros apenas quedaba casi nada, alguna bebida refrescante y poco más, por lo que continuamos hacia el siguiente.

Tras el avituallamiento vinieron unas rampas bastante inclinadas de subida, que nos pusieron las piernas a tono. Entramos en las últimas sendas de la marcha, las que ya conocíamos de años anteriores. La primera con algunas piedras que ha hace un poco técnica, pero para los que nos gusta bajar una senda estupenda, donde disfrutamos de lo lindo.

Pasamos este sendero, sinuoso en su parte media, por donde hay que esquivar árboles y piedras a partes iguales, donde hay que ir concentrados al máximo, para no cometer ni un mínimo que puede hacer que acabes abrazado al tronco de un árbol.

Un pequeño repecho y el avituallamiento, paramos unos minutos a rellenar los bidones de agua, en mi caso a llenarlo por completo pues inicié la ruta con el bidón vacío, así que llegué al bastante sediento. Comimos algún plátano y alguna barrita, bebimos algún zumo y continuamos la ruta.

Volvimos a entrar en otra senda, que ya conocíamos también de años anteriores, la de la Lavadora (creo recordar), como las otras divertida y juguetona, con sus curvas sinuosas, sus bajadas y subidas cortas, sus badenes y esquivando los troncos de los árboles y algún que otro obstáculo más. Diversión total.

Salimos a carretera y nos anunciaron desde la organización que nos quedaban unos 5 km a meta. Pasamos por el cruce donde estaba señalizando el comunitario Ricardo, paramos a echarnos una foto con él y llegamos a meta.

Un estupendo recorrido, que nos gustó más que el del año pasado, con más sendas y menos pista. No muy exigente, con unos 800 metros de desnivel acumulado subiendo y unos 38 km, que hicimos en tres horas.

Una vez finalizada la marcha procedimos a limpiarnos y asearnos un poco, a guardar las bicicletas y a entrar en la zona donde nos servirían un rico arroz. Comimos a gusto, en compañía de todos nuestros queridos comunitarios. Incluso a la comunitaria @Patricia le tocó uno de los regalos, un chaleco. No faltaron las risas, las charlas, las fotos y los vídeos. Por supuesto tampoco faltó el típico vídeo de las impresiones de la marcha, donde muchos comunitarios se animaron a salir en cámara y contar su opinión sobre la marcha.

Una jornada de convivencia estupenda, donde reinó la diversión y el «buen rollo». Lo pasamos en grande. Y no nos llevamos el jamón al grupo más numeroso por un miembro, pero se lo llevaron nuestros queridos comunitarios del C.C. Fortuna Team, que a fin de cuentas es lo mismo, salvo por el pequeño detalle del incierto destino del mismo.

Quiero acabar esta crónica agradeciendo enormemente a todos los comunitarios que se han inscrito a esta marcha benéfica como Comunidad Biker MTB y a los que han asistido y nos han acompañado. Y, por supuesto, agradecer especialmente a nuestros amigos de Los Simao por la gran labor que han realizado de organización. Sabemos y nos consta que apenas han recibido ayuda de las autoridades (del Ayuntamiento), que sí han estado para la foto pero que muy poco han aportado a este evento, benéfico y de difusión para el pueblo. Me quedo con lo bueno siempre, con el trabajazo que hay por detrás de estos eventos, con el curro que se han pegado nuestros queridos amigos Antonio de Maya, Pedro, Tony, Ricardo, Juan de Dios, David Espín, Francisco Yepes, Simba, Juan, Manolo Gamboa, etc.. A todos muchísimas gracias por vuestro trabajo para esta buena causa.

Por cierto, al acabar la marcha nos quedamos sorprendidos al ver que no habíamos sufrido crudas realidades, ni un pinchazo, algo muy extraño en la Comunidad, pero esta ilusión acabó pronto, hasta que llegó el comunitario @antasis y nos dijera que había pinchazo, que nos lo había dicho pero no lo oímos y continuamos. Ingenuos de nosotros pensando que no íbamos a pinchar, pues sí, no faltó el tradicional pinchazo comunitario.

De vuestro comunitario presidente Alonso.

  • Fotos de la marcha BTT: