Hola queridos comunitarios, hoy viernes día 30 de diciembre de 2016, penúltimo día del año, realizamos una ruta de ciclismo de carretera (digo bien y repito ciclismo de carretera). Salimos con nuestras bicicletas de carretera (la mía cedida por la comunitaria Sandra, a la cual agradecemos el detalle) desde la sede de la Comunidad en Molina de Segura, los comunitarios Alonsojpd, Paquito206 y Javier Espinosa. Decidimos ir hacia el Rellano y la Estación de Blanca.

He de decir que es mi primera ruta de ciclismo de carretera. Siendo muy estricto es la segunda, la primera la hice hace unos 7 años en el Alpe D´Huez, pero fue la primera y la última, por lo que la de hoy se puede considerar la primera. Así que aprovecharé la crónica para contar mis impresiones personales en esta incursión en el ciclismo de carretera.

Salimos a eso de las 16:36 desde la sede en Molina de Segura, fuimos (hoy siempre por carretera como es lógico) por la Cañada Morcillo, cruzando los pueblos de La Hornera, La Albarda y La Espada. En los primeros kilómetros tuvimos que parar a bajar la punta del sillín de mi bicicleta de carretera, que iba algo alto. Al principio no conseguía coger la posición correcta, la bici que llevo es de competición y lleva la potencia alargada para una posición más aerodinámica. Esto para competir está bien pero para rutas normales hace que lleve el cuerpo muy inclinado, lo cual es complicado hasta que no te acostumbras. Así que los primeros kilómetros los pasé cambiando de postura, hasta encontrar la más cómoda.

Vamos recorriendo kilómetros y voy haciéndome a la bici, a las sensaciones que son distintas a las de carretera, el manillar más estrecho por lo que cuando te levantas a pedalear de pie pierdes un poco el equilibrio y el control, hasta que te acostumbras. Luego empezaron a dolerme un poco las manos, por la posición que es diferente. Los frenos iban bien pero para frenar hay que poner las manos en una posición que me deja muy agachado, así que normalmente las llevaba arriba, alejadas de los frenos.

Rodamos a buena velocidad, intentando ir a rueda, pero con miedo por lo de los frenos, no llevo las manos cerca y me da miedo que mis compañeros frenen de golpe y me los coma, así que me distanciaba un poco. Notaba, como es lógico, que la bici corre más con menos esfuerzo, dado que lleva las ruedas mucho más finas, pesa mucho menos y la presión del neumático es mucho mayor, por lo que la superficie de contacto con la carretera es menor y por tanto el rozamiento también es menor. Todo esto hacía que corriéramos bastante más que con la de montaña.

Llegamos a la carretera del Fenazar, donde giramos a la izquierda para ir subiendo hasta el pueblo. Desde allí pasamos a la carretera de la Hurona, siempre en subida suave pero constante. Pasamos la Hurona, bajamos la rampa de la rambla y la subimos para llegar al Rellano. En la plaza del Rellano paramos unos minutos, muy pocos, a echarnos unas fotos en la zona de la pila bautismal.

Continuamos la ruta saliendo del rellano por Los López, pasando rápidos por Los Coloraos y saliendo del término municipal de Molina de Segura para entrar en el de Blanca. Por allí nos pusimos a rueda y cogimos bastante velocidad. Yo seguía adaptándome a los cambios que van muy diferentes a los de la bici de montaña, van en la propia maneta del freno. También es diferente la relación de platos y piñones, en el caso de mi bicicleta noté que en algunas rampas me faltaba algo de desarrollo, cosa normal en el ciclismo de carretera, pero se suple levantándonos de la bici y haciendo fuerza con los riñones, como pesa menos y tiene menos rozamiento acabas subiendo las cuestas.

Otra de las cosas que he ido notando en esta ruta es la amortiguación, tanto de las ruedas como de la horquilla (suspensión). En el caso de la bicicelta de carretera es inexistente, la horquilla no lleva amortiguación y las ruedas llevan muchísima presión, por lo que no amortigua ni lo uno ni lo otro. Cuando pillas un bache, si lo ves con antelación no hay problema, o bien te levantas del asiento o bien aprietas un poco para que no te dé el golpe en el culo y la zona perineal. El problema es i no te das cuenta a tiempo, en ese caso te llevas un golpe en esta zona que no es agradable.

Con todas estas nuevas sensaciones, unas positivas y otras negativas, llegamos al cruce de la Estación de Blanca con la Hoya del Campo. Nosotros giramos a la izquierda para ir hacia la Estación de Blanca. Luego continuamos por la carretera para luego subir por la vía de servicio el puerto de la Losilla. En esta zona íbamos ya de noche, con las luces encendidas.

Ahora tocaba descenso, en mi caso no iba muy seguro dado que, como he dicho antes, voy muy inclinado y alejado del manillar, por lo que no tengo sensación de control. Además de que no llevaba luces en condiciones, me iba guiando por la luz trasera de mis compañeros, esperando algún bache fuerte… Pronto llegamos al cruce hacia el trasvase, que cogimos para evitar las carreteras más transitadas.

Ahora tocaba llaneo, por la orilla del trasvase, charlando con los comunitarios Javier y Paquito206, que de vez en cuando se preocupaban por mi estado en mi primera ruta en bicicleta de carretera. A esta altura, con unos 45km, empezaba a dolerme el cuelo y los hombros, suponto que por la postura agachada, demasiado acoplada, que me producía la largura de la potencia. También generada porque no estoy acostumbrado a esta postura del ciclismo de carretera, que es un poco diferente a la del de montaña.

Continuamos la ruta de ciclismo de carretera volviendo a Molina de Segura por la nacional. En algunos tramos cogíamos buenas velocidades, aprovechando la rueda de los compañeros.

Llegamos a Molina de Segura con 60km, recorridos en unas dos horas y media, con unos 450 metros de desnivel acumulado positivo. Una buena experiencia de estreno en el ciclismo de carretera que paso a enumerar de forma resumida, las cosas positivas y las negativas.

  • Cosas positivas del ciclismo de carretera con respecto al de montaña:
    • La bicicleta pesa menos, eso la hace más ligera.
    • Las ruedas llevan muchísima presión, eso las hace más ligeras al tener menos superficie de rozamiento con el suelo.
    • La posición es más aerodinámica, eso nos hace más ligeros.
    • El manillar te da más opciones de posición de las manos, para ir más o menos acoplado en posición más o menos racing.
    • La bici no suele mancharse ni averiarse dado que no sufre impactos, más allá de algún bache.
    • No se suele parar casi nada por lo que se aprovecha más el tiempo.
    • La bici y la postura hace que sea más rápido, por lo que se hacen más kilómetros en menos tiempo y, por lo tanto, puedes llegar más lejos.
    • Los frenos son de zapata de toda la vida, los v-brake, por lo que tienen menos mantenimiento que los de disco, mucho menos.
    • Cuando vamos varios vamos más agrupados que en el ciclismo de montaña, por lo que podemos charlar entre todos.
    • Si sabes coger la rueda de tus compañeros de delante y vas con el pollo sobrevolando o bien te ha picado directamente, la ruta se hace bastante más sencilla.
    • Apenas tienes que llevar herramientas, las bicis de carretera casi nunca se averían ni se pinchan (casi nunca).
  • Cosas negativas del ciclismo de carretera con respecto al de montaña:
    • Las ruedas llevan muchísima presión, por lo que no amortiguan, si pillas un bache «te lo tragas», sufriendo un golpe en la zona perineal y el culo.
    • La posición es más inclinada, por lo que acabas con dolor de cuello (al menos hasta que te acostumbres).
    • El manillar es más estrecho, por lo que tienes sensación de menos control y pérdida de equilibrio cuando te levantas a dar pedales (al menos hasta que te acostumbres).
    • Al no parar casi nada no puedes disfrutar de las vistas, los animales, la naturaleza y otras cosas que se ven cuando paras. También hace que sea como más estresante.
    • Los frenos de zapata pueden jugarte una mala pasada cuando llueve o cuando hay que frenar en seco.
    • Las cubiertas tan finas hacen que el agarre sea inferior, así que cuando el firme está húmedo o con gravilla es muy peligroso.
    • Los frenos quedan muy alejados de algunas posturas de las manos, por lo que si tienes que frenar en seco puedes perder unos segundos que pueden ser cruciales.
    • Normalmente se va en grupo, si se cae alguien de delante lo más probable es que tú también te caigas.

Habrá más cosas positivas y negativas, conforme me acuerde iré añadiéndolas aquí mismo. En general ha sido una buena experiencia, me ha gustado rodar con bicicleta de carretera y trataré de salir una vez por semana. El ciclismo de montaña y el de carretera son complementarios, no son excluyentes ni antagónicos.

De vuestro comunitario presidente Alonso.

  • Fotos de la ruta de carretera: